06 enero 2009

Hugo como testigo de singulares aventuras y de otras no muy notables

En Vancouver la manera de celebrar el Año Nuevo es aventándose al mar (que está a 4°C) disfrazado de algo ridículo como de pingüino, de abuelita, de superhéroe o de canadiense. La mayoría de la gente sólo se avienta y regresa corriendo, otros pocos nadan hasta llegar a un bote y luego regresan y sólo uno que se arrepiente de no haberse metido como los demás y mete únicamente los pies...


(Aquí va un video pero no lo puedo subir...
Me salió hasta un mensaje que no grabé de que mande un reporte de mi problema
Número de identificación de blog:591ymasnumeros
Número de identificación de vídeo: novenianada
y que me metiera a esta página:
pero fue como las máquinas contestadoras que tienen en los bancos o en cualquier lado, que me mandaron a todos lado menos a algún sitio para poner mi "Número de identificación de Blog" y el de vídeo, así que no hay vídeo!)

Hugo, caminando en el Barrio Chino de Vancouver exponiéndose a los peligros de los leones o a los de sus amigas (Yolanda, para ser más precisos)

No pude negarme a la inflanqueable tentación de tomarle una foto a este interesante número, que desde que tengo uso de papel ha representado para mí un símbolo fascinante

Hugo comiendo la tradicional Singaporean Sambal Hot Sauce

Vancouver está llena de importantes advertencias...



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